Citroën anticipa lo que será su primer SUV pequeño con la llegada del C-Aircross Concept, que se ve influido por el C3 y el C4 Cactus. Dentro de sus puntos fuertes está en el diseño, con un marcado carácter juvenil, y algo futurista. Los grupos ópticos LED delanteros y los tridimensionales atrás, además los Airbumps reflejan fuertemente el rumbo que Citroën ha tomado en custión de estilo. Las molduras de plástico le dan un toque off-road con su pintura de camuflaje. Los rines bicromáticos de 18” y el techo blanco flotante rematan la imagen.
El Aircross mide 4,150 mm de largo, 1,740 mm de ancho y su altura es de 1,630 mm. En el interior hay pantallas verticales, asientos flotantes y una sensación arquitectónica, como si estuviéramos en el salón de alguna empresa moderna de márketing. Para visitar este espacio. Ofrece una variedad de funciones por medio de la pantalla táctil de 12”. El sistema de navegación 3D está conectado al reconocimiento de voz Citroën ConnectNav y tiene cargador inalámbrico de celular similar al del Peugeot 3008.
La aplicación Share With U viene instalada para ofrecer entretenimiento multimedia a los pasajeros, conectados por el WiFi HotSpot del coche. La connectedCAM del nuevo C3 está presente en este SUV que además de funciones de ocio, es capaz de filmar un accidente para funcionar de evidencia. Las cabeceras vienen con bocinas y micrófonos que generan una idea de burbuja de audio, potenciando un confort acústico del que los diseñadores de la marca del Grupo PSA pueden sentirse orgullosos.
Traído desde Peugeot, el C-Aircross tendrá el programa de tracción Grip Control con modos que actúen sobre la tracción para optimizar el agarre en la nieve, arena o lodo.