Más allá de ser uno de los fabricantes con mayor cantidad de unidades vendidas a nivel global, Toyota es una marca que también tiene su tradición deportiva. Si bien no goza de sobrados laureles en las primeras décadas del siglo XX (la marca se fundó en 1933, varios años después que sus pares europeos), su legado deportivo dejó marcas notorias en la industria automotriz con varios modelos que pusieron a Toyota (y a Japón) en las primeras planas del mundo automovilístico.
El último intento de la marca por recordarnos que en Japón también saben divertirse es el Toyota GT 86, un coupé desarrollado junto con Subaru (Por cierto Subaru presenta el BRZ en México este año). Dicho vehículo partía de la premisa de crear un coupé deportivo relativamente accesible (USD 25,000), destinada a los amantes de la conducción deportiva y el tuning. El resultado fue satisfactorio, pero su precio de lanzamiento resultó un 20% por encima del esperado y su éxito comercial no fue el que la marca tenía calculado al momento de crear el proyecto.
En virtud de lo anterior, en el marco del Salón de Tokio 2015 la marca nos muestra una joya que tenía guardada, el S-FR Concept. Este coupé de tracción trasera, motor delantero y dimensiones reducidas (es pequeño, pero no lo suficiente para ser considerado un Kei Car) anticipa lo que puede ser un futuro vehículo pensado para un público que no puede acceder a un superdeportivo.
La marca no ha dado detalles del apartado mecánico, salvo confirmar que cuenta con un motor en disposición longitudinal montado detrás del eje delantero que envía su fuerza al eje trasero mediante una caja manual de 6 marchas. Toyota no especifica potencia ni cilindrada, seguramente porque esos son aspectos que pueden variar mucho en el largo camino para llegar a ser un vehículo de producción. Con respecto a sus dimensiones, el Toyota S-FR tiene un largo de 3,900 mm, 1,695 mm de ancho, 1,320 mm de altura y una distancia entre ejes de 2,480 mm., espacio suficiente para albergar 4 plazas (casi un hecho que se trata de plazas traseras muy reducidas).
Con respecto a su diseño, claramente se puede ver un homenaje al Sports 800, un pequeño coupé de 580 Kg. lanzado en 1965 y comercializado sólo en la isla coronada por el monte Fuji. Quizás su agresividad deportiva quede aplacada por sus proporciones adorables, pero si vemos al S-FR Concept como un GT-86 miniaturizado, seguramente le encontremos el gusto con el tiempo.
¿Llegará a la producción? ¿Se plantará algún día cara a cara con el Mazda MX-5? Quizás una buena repercusión en el Salón de Tokio haga que los ejecutivos de Toyota tomen una decisión que nos va a poner una sonrisa a todos los que nos gusta divertirnos tras el volante. Mientras tanto, nos queda disfrutarlo solo en fotos.
